Acapulco.
Gro. Nov del 2012. Elementos de la Policía Federal destacaméntados en este
puerto, quienes piden el anonimato por obvias razones, denunciaron a la opinión
pública, un sin fín de anomalías que se
están dando al interior de esa corporación policiaca, expresando que jefes de
alto rango, están desviando los apoyos en especie, dando a conocer que uno de
los comandantes que realiza estas acciónes es Gerardo Torres Praxedis
perteneciente al Onceavo agrupamiento de esa corporación, que debería ser para
dar seguridad a los acapulqueños..
De acuerdo a la información
que llegó a nuestra redacción los inconformes señalan
al comandante Torres Praxedis, del que dicen, esta cometiendo serias anomalías
con los vales de gasolina destinados al patrullaje en Acapulco situación que
genera un desvió de aproximadamente 140 mil pesos, ( no se señala si por semana
o por mes), por parte de esta persona.
Diciendo los denunciantes que ha dado ordenes
este comandante de poner punto fijos en Acapulco y no moverse y si ejecutan a
alguien, y si no es de mucha importancia no deben moverse y si lo es, entonces si
deben ir.
Así mismo dijeron que ante
la falta de vales para cargar combustible a las unidades, no se puede prevenir
la actual incidencia delictiva que ataca al país y en especial a este puerto
turístico, cuya responsabilidad coordinan también, con otras corporaciones.
Cuando se tiene conocimiento de una balacera,
homicidio, secuestro o algún robo de vehículo con violencia, algunos de ellos
no pueden ir y evitar esa situación ya que el mismo comandante les cobra la
gasolina cuando tienen que mover el vehículo oficial a cargo, comportamiento
que no debe ser, porque, existen recursos para pagar el combustible que en
funciones de este tipo se utiliza.
Expresaron que aunque el personal de menor categoría tengan la
mejor disposición para que la violencia disminuya, mandos superiores como es el
caso del comandante Gerardo Torres impiden de manera dolosa que esta situación
termine, al menos aquí en Acapulco.
Por
ultimo expresaron que aunque estén amenazados por Gerardo Torres Praxedis ellos
se animaron a denunciar estas anomalías a los medios de comunicación, ya que
laboralmente es incomodo trabajar en esas condiciones y principalmente porque
la ciudadanía es la que sufre, al quedar indefensa ante la ola de violencia que
se esta viviendo aquí.
También
señalan que por cualquier motivo por muy insignificante que sea, se les
arresta, se les discrimina en los
alimentos y se les obliga a practicar ejercicios de manera humillante,
además de que por lo regular él referido comandante, despacha desde el hotel el Club de Yate y no del “Romano Palace” recibiendo
un trato preferencial tanto él como sus escoltas.
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