Aunque el método no fue
quizás el apropiado, muchos ciudadanos de Tecpan aplaudieron el desbloqueo
carretero que hace días llevaron a cabo taxistas de este municipio sobre la
carretera federal Acapulco-Zihuatanejo, para protestar por el servicio de
pasaje que últimamente vienen llevando a cabo camionetas urvans en el tramo de la
carretera Tecpan- Atoyac y viceversa.
Resulta que taxistas de la
cabecera municipal de la tierra de Tatagildo, bloquearon por algunos minutos la
vía Federal que atraviesa esta cabecera Municipal, para protestar por el nuevo
servicio de pasajeros que prestan a partes iguales transportistas del municipio
de Atoyac y de Tecpan. Eso sí, con camionetas nuevas que ya empiezan a gozar de
la preferencia de los pasajeros ello incomodo a los taxistas y lo primero que
hicieron fue bloquear la carretera como ya es costumbre de otras organizaciones
sociales y de la CETEG. Esto no fue bien visto por algunos ciudadanos civiles
de quienes se ignora si fueron de esta población, del municipio de Atoyac o de
algunos vecinos de comunidades que se han visto beneficiados con este nuevo
servicio de transporte que los realizan de manera directa entre Atoyac y Tecpan
como ya se dijo líneas arriba.
Resulta que los ciudadanos
no identificados llegaron al plantón y sin decir agua va les dieron de plazo un
minuto para que se retiraran y si no los desalojarían a la fuerza con palabras
altisonantes claro, lo que de momento no gusto a los bloqueadores pero que
finalmente tuvieron que acatar esa terminante orden.
En la Costa Grande como en
otras partes del Estado y del país es muy común bloquear carreteras, tomar
edificios y oficinas públicas para exigir a las autoridades apoyos personales
que solo benefician a los interesados y perjudican a toda una sociedad,
principalmente a niños de escuelas, trabajadores, enfermos que son trasladados a
algún hospital o a las amas de casa cuando salen a hacer sus compras.
Quizás no fue la medida
acertada pero debiera servir de ejemplo para que quien intente realizar actos
de este tipo lo piense dos veces por que la gente, ya se está cansando de estos
actos que en nada ayudan al bienestar social y si perjudican a casi toda la
población.
Quienes tuvieran alguna
inconformidad por la mala atención del gobierno deberían bloquear las oficinas
del funcionario que no les presta la atención debida, aunque también cabe la
aclaración que estos son actos penados por la ley que se castigan con cárcel.
Decimos lo anterior para que después estas personas bloqueadoras de instancias
de gobierno no se hagan las victimas cuando se les aplique la ley que norma
nuestro estatuto jurídico.