Luis Jijón León/NOTYMAS
Chilpancingo, Gro., julio 24 de 2016 (NOTYMAS).- El presidente
municipal de Pungarabato Ambrosio Soto Duarte, pidió ayuda 14 días antes de que
fuera asesinato al presidente, Enrique Peña Nieto.
El llamado de auxilio se
dio luego de que fuera asesinado su primo y ante las constantes amenazas de
muerte que recibía por parte de integrantes de la delincuencia organizada, pero
no obtuvo respuesta.
El edil fue asesinado
durante una emboscada por hombres armados la noche del sábado en la comunidad
de San Lucas perteneciente al estado de Michoacán. En el lugar perdió la vida
su chófer y resultaron heridos los agentes federales que estaban asignados a su
seguridad.
El 8 de julio, el edil
perredista pidió ayuda a través de las redes sociales a Peña Nieto, tras las reiteradas amenazas de
muerte de las que era objeto por integrantes de la delincuencia organizada.
“Mataron a mi primo,
estoy amenazado por la delincuencia organizada. Ya es hora de actuar señor presidente
EPN (Enrique Peña Nieto) Tierra Caliente lo necesita”, publicó en su cuenta de
Twitter, Ambrosio Soto.
Sebastián Soto Rodríguez,
primo del edil, fue encontrado asesinado junto a su chófer el 5 de julio en un
basurero ubicado en Cutzamala de Pinzón.
Tras los hechos el primer
edil solicitó el regreso de la Policía Federal, pues tras su salida, declaró,
los municipios de Tierra Caliente y sus comunidades habían quedado a merced
de los grupos de la delincuencia.
El siete de julio Soto
Duarte, denunció ante reporteros al concluir un evento en Casa Guerrero, que
había sido objeto de nuevas amenazas por integrantes de la delincuencia
organizada y los criminales le advirtieron a través de un mensaje de texto en
su celular que aprovecharían la salida de la Policía Federal para asesinarlo.
“Nosotros queremos
sumarnos a la petición que hizo el gobernador (Héctor Astudillo Flores) en el
gobierno federal para que regrese la Policía Federal a la Tierra Caliente,
están sucediendo eventos preocupantes, complicados, que vale la pena que el
gobierno federal regresé a ver a la Tierra Caliente”, expuso.
El asesinato de su primo,
lo tomó como una advertencia de los grupos delincuenciales y dijo estar
dispuesto a encabezar un movimiento de autodefensa con los ganaderos quienes
comenzaban a armarse ante el robo de sus animales.
En noviembre del 2015,
semanas después haber asumido el cargo, el edil, denunció públicamente que un
grupo de la delincuencia organizada le exigía como cuota tres millones de
pesos, lo que lo obligó a presentar su renuncia al Comité Ejecutivo Nacional
(CEM) del PRD.
Dicha denuncia, obligó a implementar un operativo especial en
la zona, la cual no dio resultados y las extorsiones y secuestros a
comerciantes continuaron.
A principios del mes de
enero, fue secuestrado el esposo de la síndica Rosalba Rendón Andrade, Gustavo
Borja.
Dentro de las demandas de
los delincuentes para no asesinar al empresario fue una fuerte cantidad de
dinero y la renuncia al cargo de la síndica.
El asesinato de Soto
Duarte, es responsabilidad de Peña Nieto, quien se negó a brindar la atención a
la violencia en Tierra Caliente y prefirió utilizar a los elementos federales
para reprimir al magisterio que combatir a los delincuentes, denunció la
secretaria general del Comité Ejecutivo Nacional (CEM) del PRD, Beatriz Mojica
Morga.
A través de su cuenta de
Facebook, Mojica Morga recordó que el edil denunció las amenazas de la
delincuencia organizada y pidió ayuda al gobierno federal, pero no fue
escuchado y lo asesinaron.