Chilpancingo, Gro., enero 11 de 2014
(IRZA).- El Obispo de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, Alejo Zavala Castro,
confió que en este 2014 disminuya la inseguridad y la violencia en Guerrero
“Aunque creemos que esto será muy difícil, desde diciembre estamos rezando
porque en este año la inseguridad pública se detenga”, expresó el clérigo que
fue entrevistado en sus oficinas.
En el 2013, los obispos de Guerrero, denunciaron ser objetos de amenazas de
extorsión y de secuestro.
“Así es, en esa ocasión denunciamos que éramos amenazados por la
delincuencia pero hasta el momento no hemos sabido de algún caso; todo está
bien, gracias a Dios, aseveró Zavala Castro.
El Obispo hizo un llamado a las autoridades a que no solo garanticen la
tranquilidad y paz a los guerrerenses sino que también resuelvan las demandas
sociales
“Es una demanda prioritaria ya que la gente de Guerrero principalmente de la
región de la Montaña que siempre ha vivido en la pobreza y la marginación, se
les atienda”, expresó.
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