Fernando Polanco Ochoa/IRZA
Chilpancingo, Gro., septiembre de 2015.- Raúl
Miliani Sabido, secretario de Protección Civil del gobierno estatal, informó
que algunas viviendas de la colonia El Mirador, en Chilpancingo, se
construyeron sin dictámenes.
Esas
viviendas fueron entregadas a las familias damnificadas por la tormenta Manuel
y el huracán Ingrid que azotó Guerrero en septiembre del 2013. Las viviendas
entregadas registran cuarteaduras y hundimientos.
Miliani
informó que la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu)
no solicitó dictámenes para todas las viviendas. “Algunos los hemos tenido que
hacer a petición de los damnificados que llegan a ocupar la misma
”.
Detectaron
“fallas constructivas” pese a que el terreno es factible para la construcción
de viviendas, pero tiene que ser armonizado con la introducción de servicios.
Informó
también que durante ese tiempo cuatro funcionarios de Protección Civil Estatal
fueron suspendidos porque estaban cobrando los dictámenes, los cuales son
gratuitos hasta el momento.
Sobre
los daños que dejaron los fenómenos naturales indicó que se está avanzando en
la reconstrucción física y hasta cierto punto en la social, pero hace falta la
económica y la jurídica.
Ésta
última tiene que ver con las irregularidades que se cometieron para el cambio
de uso de suelo en zonas de humedales, principalmente en Acapulco.
Por eso
urgió una reforma a la Ley de Desarrollo Urbano, para que las licencias de
construcción no sólo las autoricen los municipios, sino que sea un órgano colegiado.
En
materia de sismicidad, Miliani aceptó que para este año no fue posible ampliar
la alerta sísmica por falta de recursos. El presupuesto de este año para
Protección Civil fue de 244 millones de pesos, precisó.
La
licencia de la alerta sísmica le cuesta 3 millones de pesos al gobierno del Estado.
“El
problema es la falta de presupuesto. Para que contamos con ocho equipos si nos
cuesta ente 10 y 12 millones de pesos, para equipamiento y capacitación de
personal. Más adiestramiento de perros, que cuesta 3 millones de pesos”,
sostuvo.
“No es
tan caro, pero no hay recursos. Si tenemos ese presupuesto en los radios de
alerta sísmica, podemos informar sobre lluvias, marchas, manifestaciones, accidentes
de tránsito, bloqueos carreteros, podemos llevar información a la población de
manera más rápida”, señaló.
Informó
que necesitan de uno a dos helicópteros para utilizarlos como ambulancia aérea
para atender las zonas más complicadas de acceso. “Son muchos ejes que se
tienen que replantear”.
“Es
hacer una reingeniería de la administración pública estatal, ante la falta de
recursos, por eso hay que insistir en la prevención”, sostuvo.
En caso
de tsunami, confirmó, no cuentan con plataformas de refugio, principalmente en
Acapulco. “Si ocurre un sismo en la
brecha de Guerrero y si después viene un tsunami, nos va a golpear muy fuerte”.