Carlos
Navarrete, Chilpancingo, Gro. 24 de junio del 2013.- Este lunes iniciaron los
trabajos de reconstrucción de la primaria General Lázaro Cárdenas,
luego de que la semana pasada alumnos de este plantel salieran a las calles a
tomar clases como una forma de protesta, pues llevaban dos años en edificios
que ponía en riesgo la integridad física de estudiantes y docentes.
Desde
las ocho de la mañana trabajadores de la constructora CAT arribaron a las
instalaciones de la escuela, en la que realizaron un desmantelamiento, es decir
quitaron cristalería, herrería y cableado, para que a más tardar el día
miércoles comience la demolición de los tres edificios con los que
cuentan.
El
director del plantel, Carlos Botello Barrera informó que el recurso total
para la reconstrucción de la escuela será de 14 millones de pesos que los
destinará el Gobierno del Estado a través del Instituto Guerrerense para la
Infraestructura Física Educativa (IGIFE).
Explicó
que la obra habrá de desarrollarse en dos etapas, la primera contempla la
demolición del edificio A y que será concluido en al menos cuatro meses,
mientras que en la segunda se habrán de demoler el edificio B y C, pero esto
dependerá de la rapidez con que se concluya la primera etapa.
Dijo
que ya están buscando sedes alternas para que los alumnos puedan concluir el
ciclo escolar que según el calendario termina esta semana, y aunque aún no
cuentan con los lugares en donde los estudiantes tomarán clases, aseguró que no
está en riesgo de perderse este periodo.
Botello
Barrera comentó que será el Gobierno del Estado quien absorba los gastos correspondientes
a la renta de los lugares en los que se habrán de instalar de manera temporal
hasta que se concluyan los trabajos de reconstrucción en esta escuela.
Indicó
que son tres edificios con los que cuenta la escuela primaria, con un total de
13 aulas, una biblioteca, dirección y una cooperativa, de estos únicamente
serán construidas dos, mientras que en el área donde se encuentra el tercer
edificio será adaptado como una zona de seguridad en caso de sismos.
Manifestó
que la cancha deportiva y el techado del plantel se mantendrán, además el
número de salones de clases incrementará a 17 para los 509 estudiantes que
conforman la matrícula escolar y los 28 maestros de la planta docente.
El
director de esta institución educativa recordó que hace dos años Protección
Civil municipal y estatal emitieron un dictamen en el que informaban que el
edificio presentaba graves daños en su estructura por lo que era necesario
desalojarlo cuanto antes para no exponer a estudiantes y docentes.
Sin
embargo, a pesar de que se realizaron las gestiones correspondientes ante las
autoridades educativas y que se les autorizó la demolición de toda la escuela,
por razones aún desconocidas no se habían liberado los recursos para iniciar
con la obra, pero después de la protesta de la semana pasada consiguieron
resultados (ANG).