Olivia Ortiz/NOTYMAS
Tixtla, Gro., octubre del 2014. Celestino
Gómez, ex alumno de la Escuela Normal Rural “Luis Villarreal” de la comunidad
El Mexe, municipio de Hidalgo, que dejó de funcionar en julio del año 2008,
expresó su convicción de que la masacre ocurrida contra estudiantes de la
Normal “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa está encaminada a cumplir el proyecto
gubernamental de cerrar las 16 normales rurales que aún existen en el país, “es
el mismo método que utilizaron en el Estado de Hidalgo”, aseguró el ex
estudiante.
El joven
lamentó el proyecto al considerar que estas escuelas son de gran beneficio para
hijos de indígenas y de campesinos ávidos de prepararse académicamente, “las
normales rurales benefician al pueblo pero no le convienen al gobierno porque
tienen un enfoque socialista”. Asimismo exhortó a los jóvenes de Ayotzinapa a
continuar luchando de pie y no caer en las provocaciones del gobierno. Sí a las
normales rurales, que se convierten en hogar del pueblo marginado y que a
través de la lucha han logrado grandes cambios sociales.
Con esta
versión coincide Jorge Peralta Hernández, egresado de la Normal de Ayotzinapa,
director y docente durante 29 años de ese plantel educativo, quien consideró
que la matanza del viernes 26 de septiembre está encaminada al cierre del
plantel “no podemos permitir este ataque contra jóvenes indefensos que luchan a
través de las ideas y si salen a las calles es porque el mismo sistema de
gobierno lo propicia”.
Aceptó
que las 32 normales rurales que surgieron con el proyecto de Lázaro Cárdenas,
con la finalidad de ofrecer una educación socialista en la década de los 30,
tuvieron su época de gloria, “lamentablemente han sido cerradas 16 y continúa
el proyecto nacional de exterminarlas aunque durante muchos años han servido de
manera política al gobierno. Sin embargo sabemos que habrá mucha resistencia de
la sociedad estudiantil porque este tipo de planteles han dado albergue a
jóvenes humildes hijos de campesinos y de indígenas”.
Al
preguntarle qué hace falta para que la escuela recobre su prestigio de ser
formadora de maestros brillantes, aceptó que actualmente se carece de un plan
de estudios bien definido a nivel nacional por parte de la Secretaría de
Educación Pública, “la escuela ha
sufrido muchas transiciones, antes se creaban maestros que servían al pueblo,
hoy con los problemas de la delincuencia, pobreza extrema y otros más, el
maestro va a enfrentar una situación más compleja que hace años y por tal
motivo el plan se tiene que actualizar”.
Se
necesita una transformación académica que el gobierno puede hacer porque tiene
los elementos necesarios para lograrlo y no siga siendo utilizada para
proyectos políticos, pues no dudó que como siempre, la Escuela Normal Rural
“Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa tenga infiltrados, contra los que siempre se
ha luchado, concluyó Peralta Hernández.