Lores y Comunes
Miguel
Ángel Mata Mata
Válgame
el Santo Niñito, dirían por ahí nuestros compañeros católicos al enterarse de
barbaridades tan inmensas que sólo la invocación al Ser Supremo puede paliar.
No hay de otra para sanar las heridas morales como la que nos han causado
nuestros queridos políticos guerrerenses.
Antes de
reseñar la amoralidad de quienes son representantes según nuestro sistema
político que es una democracia representativa, vayamos por partes. En
Reino Unido existen dos Cámaras de Representantes. Ambas constituyen lo que en
México se define como el poder Legislativo. Esas son las de Los Comunes y las
de Los Lores. La primera es la Cámara Baja y la segunda es la Cámara
Alta.
Es algo
así como la Cámara de Diputados y la Cámara de Senadores en nuestro país. Nada
mas que allá, donde existe una reina y un parlamento fuerte, a Los Comunes los
elige el pueblo a través de las urnas y a Los Lores los elige la Reina de entre
obispos o miembros de la realeza. A éstos les dan cargos vitalicios mientras a
los comunes los eligen cada cinco años.¿Qué
tiene que ver esto con México, Guerrero o Acapulco?, podemos preguntar. Nada,
podemos responder. Salvo que allá, en donde una reina tiene injerencia en los
asuntos de Estado, requiere de sus representantes para defender sus intereses
frente a los del pueblo que elige a sus comunes para defender los intereses del
pueblo.
En
estricto sentido en México los Senadores debieran defender los intereses de un
Rey inexistente en nuestro país. Es por eso que se dice defienden los intereses
de los gobernadores o del Presidente de México. Los diputados debieran defender
los intereses del pueblo. Nuestra realidad mexicana nos
dice que en la práctica no es asi. Los diputados saltan a senadores y viceversa
y tan solo representan sus intereses personales y familiares. ¡Por eso
invocamos al Santo Niñito ante semejante barbaridad!
Pero hay
mas. Los Lores, miembros de la realeza, pertenecen a las familias de sangre
azul de Inglaterra. Son los mismos apellidos, es el mismo linaje. Los Comunes
son el pueblo vivo.
Otra vez
preguntamos ¿Qué tiene que ver eso con nuestro querido Guerrero? Nada. En
absoluto nada. Salvo que hace días, al leer la lista de candidatos
plurinominales registrada por el PRI ante el Instituto Estatal Electoral de
Guerrero, encontramos que los primeros tres sitios corresponden a miembros de
gentiles familias de utópicas realezas guerrerenses.
Los
primeros tres sitios en la listas de candidatos a diputados plurinominales son
los que tienen segura su llegada al Congreso Local. Leemos que en primer lugar
va Héctor Astudillo; en segundo Julieta Fernández de Añorve y en tercer sitio
Rubén Figueroa Smutny.
Ellos
representan los intereses de sus familias. Nada tienen de representantes del
pueblo.
Por eso invocamos al Santo Niñito cuando nos
enteramos que aquí, en nuestro querido Guerrero, modificamos las reglas de la
democracia y nos hemos dado cuenta que aquí, lo mismo que en Reino Unido,
existe una realeza que se apropia de las curules como se hace allá. Nomás que
allá si les llaman lores. Aquí se disfrazan de comunes. ¿Son los apellidos
Astudillo, Añorve y Figueroa Comunes? Creemos que son Lores.