Josefina
Aguilar Pastor/NOTYMAS
Chilpancingo,
Gro., septiembre 06 del 2015 (NOTYMAS).– En medio de un nuevo asesinato, el obispo de
la diócesis Chilpancingo-Chilapa, monseñor Salvador Rangel Mendoza, visitó este
domingo, el municipio de Chilapa, donde fue recibido por feligreses católicos y
autoridades locales, a quienes llamó a no tener miedo y a enfrentar la
situación.
Desde muy temprana hora, vecinos de la
cabecera municipal, se dieron a la tarea de instalar una bienvenida con flores
y arreglos artesanales en honor del clérigo, quien llegó a las 11:00
horas aproximadamente, siendo recibido con gran algarabía, en tanto el acceso era resguardado
por elementos de la policía federal.
De ese punto, monseñor caminó hasta la
glorieta, donde ya era esperado por otro grupo de gentes, quienes lo recibieron
con el mismo entusiasmo, de ahí se dirigió a la catedral, donde en su sermón, ante miles de feligreses Rangel Mendoza aceptó que Guerrero está en una
situación difícil “pero mis hermanos, Jesús nos decía “No tengan Miedo”, y es lo
que es quiero decir a todos y a cada uno de ustedes”.
Les pidió tener fe en Dios y en María
Santísima “ciertamente el Estado de Guerrero desde los acontecimientos de Iguala se ha convertido como el punto de enfoque de todo el mundo” refirió, por lo que
también encargó a los periodistas a que no le pongan demás a sus notas, en
referencia a la ola de violencia ya que“honestamente los periodistas a veces le
ponen de más, porque tienen que comer, y entre más arguende armen con la
noticia, pues más le pagan, entonces yo les pediría también a los periodistas
que reporten lo justo, lo que es la verdad y que no le pongan de más porque a
los que nos están mal informando son a todos los que vivimos en Guerrero”.
El obispo Salvador Rangel Mendoza,
reconoció que hay problemas en el Estado, pero no se van a resolver
volteando a otro lado ni metiendo la cabeza en la tierra como el avestruz
“tenemos que afrontar la situación que vivimos, pero quiero decirles que hay
más gente buena y más positiva“.
Insistió en que con fe y con
valentía, es como se debe afrontar la situación que se vive, como las
injusticias, desigualdad, y la problemática, “vamos a levantar la cabeza,
vamos a afrontar la situación para que el estado pueda vivir ene estabilidad
social, política, económica en una gran seguridad y gran paz, llevando como arma
a la oración”, apuntó el obispo.
Y que para que esto camine se necesita sobre todo verdad,
“porque nos dicen verdades a medias, hay muchas cosas ocultas y si las
autoridades quieren que les tengamos confianza nos tienen que hablar con la
verdad, para poder recobrar la paz, la tranquilidad y así seguir adelante”. Por
último el obispo señaló que otra arma muy poderosa que tiene la población,
es la democracia “ojala y que podamos ejercitar nuestros derechos como
ciudadanos y exigir aquello que necesitamos”, recalcó el Obispo Salvador Rangel
Mendoza. (NOTYMAS)