Juan José Romero/NOTYMAS
Chilpancingo, Gro.,
abril del 2015.– Los insumos
con los que elaboran la tortilla que todos los días se sirve en la mesa de la
inmensa mayoría de los guerrerenses podría aumentar de precio ante la alza que
registran de manera mensual, advirtió el líder de los Industriales de la Masa y
la Tortilla, Abdon Hernández Olvera.
El líder de los molineros explicó que el
costo real del kilo de tortilla es de 21 pesos y actualmente el precio al que
se vende al consumidor es de apenas 12 y 14 pesos en zonas como Chilpancingo,
mientras que en Acapulco el precio del kilo de tortilla oscila en los 13 y 16
pesos y en las Costa Grande alcanza los 17 pesos.
“Nuestro problema son dos, es más que nada
la cuestión de los precios de los insumos como es el gas, la luz, la gasolina
es ahí donde nos pega muy fuerte, y la otra, la contracción en el mercado
básicamente hay muy poco dinero en el mercado sobre todo en Chilpancingo lo que
ha hecho que tengamos una reducción significativamente de los clientes”,
expuso.
Ante esto, dijo están llevando a cabo
gestiones ante el gobierno del Estado para que los ayuden y así poder mantener
el precio de la tortilla a los consumidores, ya que desde su punto de vista
apenas subsisten por las pocas ganancias.
Sostuvo que pese a la situación del alza en
los insumos el precio podrían sostenerlo hasta finales de este año, sin
embargo, se dijo confiado que con la llegada del nuevo gobierno del Estado las
cosas puedan cambiar para beneficio de quienes se mantienen de este negocio.
“Hemos acordado a través de nuestro
presidente Arcadio Castro….de que nos vamos a sostener lo más que
se pueda y ojalá y pueda ser todo el resto del año, para que cuando llegue el
nuevo gobierno podamos establecer asociaciones de apoyo”.
Hernández Olvera señaló que las pérdidas
que han tenido se suman otros factores como la inseguridad que priva en
diversos puntos de la entidad y que ha pegado principalmente en Acapulco donde
a varios de los empresarios de la industria de la masa y la tortilla lo han
secuestrado, aunado al pago de derecho de piso y extorsiones de las que con
víctimas.
“En mi caso también fue secuestrado”,
aunque refirió que en el caso de Chilpancingo, la inseguridad ha “pegado” con
menos fuerza “gracias a dios”, lo cual les ha permitido trabajar con más
libertad, porque no han tenido conocimiento de extorsiones para con los
industriales de la masa y la tortilla.
En cuanto al apoyo gubernamental, Hernández
Olvera dijo que la idea es que así como los copreros cuentan con un presupuesto
asignado, para la comercialización de su producto, ellos lo puedan tener para
la comercialización del maíz, apoyados en programas a través de la
Secretaria de Desarrollo Económico (SEDECO), para que se conjunten recursos
federales y la bolsa pueda crecer más, entre otras opciones.
“Lo que proponemos es que el gobierno
estatal sea participe de la comercialización del grano para que todo este maíz
que hay una gran producción en los meses picos que son diciembre, enero y
febrero, pueda comprar y después nosotros podamos adquirir el grano aquí en
Guerrero para los meses que son más difíciles”, señaló.