|
Añadir leyenda |
Aire
acondicionado y calefacción:
Utiliza
la vegetación a tu favor; plantar árboles en puntos estratégicos ayuda a
desviar las corrientes de aire frío en invierno y a generar sombras en el
verano.
Mediante
la instalación de toldos de lona o aleros inclinados, persianas de aluminio,
vidrios polarizados, recubrimientos, mallas y películas plásticas, se evita que
el sol llegue directamente al interior. Así se pueden obtener ahorros en el
consumo de energía eléctrica por el uso de aire acondicionado.
El
aislamiento adecuado de techos y paredes ayuda a mantener una temperatura
agradable en la casa.
Si
utilizas unidades centrales de aire acondicionado, aísla también los ductos.
Es
relativamente sencillo sellar las ventanas y puertas de la casa con pasta de
silicón, para que no entre el frío en los meses de invierno y no se escape en
los meses calurosos.
Cuando
compres o remplaces el equipo, verifica que sea el adecuado a tus necesidades.
Dale
mantenimiento periódico y limpia los filtros regularmente. Vigila el
termostato, puede significar un ahorro adicional de energía eléctrica si
permanece a 18°C (65°F) en el invierno, y a 25°C (78°F) en verano.
En clima
seco usa el cooler, es más económico y consume menos energía que el aire
acondicionado.
Aspiradora:
Los
filtros y los depósitos de polvo y basura de la aspiradora saturados hacen que
el motor trabaje sobrecargado y reduzca su vida útil. Cámbialos cada vez que
sea necesario.
Verifica
que la manguera y los accesorios estén en buen estado.
Audio y
video:
No dejes
encendidas lámparas, radios, televisores u otros aparatos eléctricos cuando
nadie los está utilizando.
Horno y
tostador:
Mantén
siempre limpios de residuos el horno de microondas, el horno eléctrico y el
tostador, así durarán más tiempo y consumirán menos energía.
Iluminación:
Utiliza
lámparas fluorescentes compactas en sustitución de focos incandescentes; éstas
proporcionan el mismo nivel de iluminación, duran diez veces más y consumen
cuatro veces menos energía eléctrica.
Pinta el
interior de la casa con colores claros, la luz se refleja en ellos y requieres
menos energía para iluminar.
Instalación
eléctrica:
Comprueba
que la instalación eléctrica no tenga fugas. Para eso, desconecta todos los
aparatos eléctricos, incluyendo relojes y timbre; apaga todas las luces y
verifica que el disco del medidor no gire; si el disco sigue girando, manda
revisar la instalación.
Lavadora:
Carga la
lavadora al máximo permisible cada vez, así disminuirá el número de sesiones de
lavado semanal.
Utiliza
sólo el detergente necesario; el exceso produce mucha espuma y hace trabajar al
motor más de lo conveniente.
Licuadora:
Una
licuadora que trabaja con facilidad dura más y gasta menos; comprueba que las
aspas siempre tengan filo y no estén quebradas.
Plancha:
La
plancha es otro aparato que consume mucha energía. Utilizarla de manera
ordenada y programada, ahorra energía y reduce los gastos.
Plancha
la mayor cantidad posible de ropa en cada ocasión, dado que conectar muchas
veces la plancha ocasiona más gasto de energía que mantenerla encendida por un
rato.
Plancha
primero la ropa gruesa, o que necesite más calor, y deja para el final la
delgada, que requiere menos calor; desconecta la plancha poco antes de terminar
para aprovechar la temperatura acumulada.
No dejes
la plancha conectada innecesariamente.
Revisa la
superficie de la plancha para que esté siempre tersa y limpia; así se
transmitirá el calor de manera uniforme.
Revisa
que el cable y la clavija estén en buenas condiciones.
Refrigerador:
El
refrigerador es uno de los aparatos que consume más energía en el hogar.
Sitúa el
refrigerador alejado de la estufa y fuera del alcance de los rayos del sol.
Comprueba que la puerta selle perfectamente y revisa periódicamente el empaque,
si no cierra bien puede generar un consumo hasta tres veces mayor al normal.
Deja
enfriar los alimentos antes de refrigerarlos. La posición correcta del
termostato es entre los números 2 y 3. En clima caluroso, entre los números 3 y
4.
Si
piensas comprar refrigerador nuevo, selecciona el que consuma menos energía
eléctrica. Revisa la etiqueta de eficiencia energética, que indica que ese
aparato cumple con la Norma Oficial Mexicana y ahorra energía. Recuerda que los
de deshielo automático consumen 12% más de electricidad y eso significa mayor
gasto.
Descongela
el refrigerador y limpia con un paño húmedo el cochambre que se acumula en la
parte posterior, por lo menos cada dos meses. Limpia los tubos del condensador
ubicados en la parte posterior o inferior del aparato por lo menos dos veces al
año.
Puedes compartir esta información para ayudar a las personas para que tengan conocimiento de estos datos y puedan tener un gasto económico menor en cuanto al gasto de la luz.