Ciudad
de México, octubre 31 de 2015 (IRZA).- El Partido de la Revolución
Democrática (PRD) esperará el plazo de 72 horas de ley para saber si Erick
Ramírez Crespo, alcalde de Cocula, Guerrero, enfrenta o no un proceso penal,
para decidir si lo expulsan del partido.
Al fijar la posición del
PRD, su dirigente nacional, Carlos Navarrete Ruiz, dijo que esperan que se
aclare puntualmente si Ramírez Crespo tiene nexos con el narcotráfico, o en su
caso establecer si se encontraba amenazado por el grupo criminal de “Guerreros
Unidos”.
Pero indicó que cuando
Ramírez Crespo fue postulado candidato, “ni la PGR, ni el PRD contaron con
datos que vincularan al hoy presunto responsable con el crimen organizado y que
impidieran su postulación a la Presidencia Municipal”.
También informó que tuvo
comunicación con el padre del alcalde de Cocula y le refirió que su hijo en los
últimos días recibió amenazas en su celular por parte de bandas del crimen
organizado.
Añadió que en su calidad de
dirigente nacional desconoce si efectivamente existen dichas amenazas, ya que
el alcalde de Cocula nada le comunicó.
Consideró que si la
delincuencia los trataba de obligar o chantajear, tuvieron que ir ante la
autoridad correspondiente a denunciarlo.
Al referirse a Eloy Flores
Cantú, otro de los detenidos con armas y droga junto con Adán Zenén Casarrubias
Salgado (“El Jitomate”), hermano de Mario y Sidronio, líderes de Guerreros
Unidos, aseguró “que no saben quién es”.