Luis
Jijón León/NOTYMAS
Chilpancingo,
Gro., octubre del 2015 (NOTYMAS).- Decenas de médicos son
extorsionados por integrantes de la delincuencia organizada o en su caso
levantados para ser obligados a ofrecer servicios médicos a dichos grupos, así
lo dio a conocer Rogelio Rivera Mora, secretario general de la sección 17 del ISSSTE.
Los lugares más peligrosas
para los doctores en la zona Norte del Estado, son los municipios de: Iguala de
la Independencia, Ciudad Altamirano, Teloloapan y Apaxtla; asi como Coyuca de
Catalán, Arcelia y San Miguel Totolapan, ubicados en la región de Tierra
Caliente; mientras que en la zona Centro del Estado, Chilapa de Álvarez y
Zitlala.
En algunos de los casos el
hostigamiento a los doctores y enfermeras se da en complicidad con los
pobladores de las comunidades, quienes se sienten protegidos y exigen
medicamento y mejor atención, así lo dio a conocer el Coordinador Municipal de
Salud en el municipio de Chilapa de Álvarez.
En la entrevista el líder
sindical del ISSSTE, refiere que las consecuencias de las amenazas y acoso en
contra los trabajadores de la salud, se da por dos razones, “tanto la extorsión
por la ganancia económica, como el levantarlo para buscar un servicio por parte
del médico o de la enfermera”.
Indicó que las zonas donde
periódicamente recibe solicitudes de cambio de adscripción a causa de las
extorsiones es la región de Tierra Caliente, “Altamirano, Teloloapan y
Apaxtla”.
Sin dar fecha de los
hechos, denunció que, cinco enfermeras, un doctor general, dos médicos
especialistas, una trabajadora social, cuatro trabajadores administrativos y un
odontólogo, que laboran en el municipio de Tlapa, han solicitado su cambio de
adscripción, pues manifiesta que corren el riesgo de morir, luego que durante el traslado a su centro de
trabajo, fueran bajados del transporte público o vehículos particulares por
hombres armados, tirados al piso y
amenazados con armas de fuego, narró Rivera Mora.
Por su parte el Coordinador
de Salud municipal de Chilapa de Álvarez, Jesús Castro denunció que los integrantes de grupos
delictivos les exigen cuotas, para que se eviten algún conflicto o problemas
con ellos.
Manifestó que,
“anteriormente había un respeto por parte de los grupos delictivos al personal
de salud, aquí se ha ido haciendo un poco más este problema, por la misma población de
esas localidades, porque se siente
respaldados por ellos (los integrantes de la delincuencia), para exigir una mejor atención o algún
medicamento con el que no se cuenta en ese momento en el centro de salud, ellos
(los pobladores) piensan que ya tienen el derecho para exigir y se le otorgue todo eso en ese
instante, entonces no es tanto la
delincuencia sino los mismos habitantes de las localidades por sentirse apoyados por ellos”.
Ante esto, son los propios
trabajadores, quienes compran el medicamento en farmacias particulares, para no
tener represalias por parte de los usuarios, quienes son protegidos por los
integrantes de la delincuencia organizada, por lo que en el último mes ocho médicos y
enfermaras han solicitado cambios de adscripción ante dichos hechos, refiere el
reporte.
Una enfermera que tenía 20
años de servicio en el municipio de Chilapa, narró que decidió abandonar su
centro de trabajo, luego de que en el mes de enero, la unidad del transporte
público en la que se trasladaba a Chilpancingo, fue interceptada por un grupo
de hombres armados.
Siendo ella, la única que
bajaron del vehículo, luego de que le pidieran su identificación y se
acreditara como trabajadora del sector salud, por lo cual decidió salir del
municipio, ante el temor de que un grupo delictivo ya la tuviera identificada.
Estela, una enfermera quien laboraba en la clínica del ISSSTE en
Tierra Caliente, también abandonó su lugar de trabajo, por las advertencias de
integrantes de la delincuencia, “porque de hecho primero son advertencias, no
quisimos esperar a lo segundo, ellos inician pidiendo el pago de una cuota
fija, siendo que los lugares donde trabajamos no es como para una cantidad que
se saque lo que ellos piden”, expresó.
En el reportaje dado a conocer en un medio televisivo nacional, da su
testimonio una pareja, quienes eran propietarios de una clínica privada en
Teloloapan y desde hace 10 meses salieron huyendo del lugar, luego de que un
grupo de hombres armados llegaran al lugar.
El pasado 19 de junio,
cuatro trabajadores de la Secretaría de Salud, desaparecieron en la carretera
federal Chilpancingo-Acapulco. Días después la unidad en la que se trasladaban
fue encontrada con impactos de bala a la altura del poblado de Xolapa.
La Fiscalía General del
Estado (FGE), encontró cuatro cuerpos semienterrados, con avanzado estado de
descomposición e impactos de bala, después de la desaparición de los trabajadores arriba mencionados, según las pruebas periciales arrojadas se trataban de los empleados del sector salud que desaparecieron en el tramo federal Chilpancingo-Acapulco, pero sus familiares negaron
dichos resultados. (NOTYMAS)