Salomón
Cruz Gallardo/IRZA
Chilpancingo, Gro., noviembre del 2014. Familias
desplazadas por la violencia que priva en la comunidad de Santa María Sur,
municipio de San Miguel Totolapan, región de la Tierra Caliente, protestaron a
principios de la semana en Palacio de Gobierno, para exigir recursos para su alimentación.
En
la protesta participó un centenar de personas quienes consignaron en pancartas:
“Nos urge la liberación de los recursos para nuestra alimentación”; “Queremos
un trato digno como desplazados”;
“No
estamos por gusto en Chilpancingo, nos urge seguridad para nuestros pueblos”;
“Queremos regresar porque ya estamos casados de vivir como refugiados”, entre
otras.
Eduardo
Macedo Jaimes, precisó que son al menos 117 familias que desde hace cinco meses
de las comunidades de San María Sur y El Barroso, de ese municipio, están aquí
en Chilpancingo, albergados en el salón Calipso, porque se sienten totalmente
desprotegidos ante la inseguridad que priva en su pueblo.
Externaron
que desde junio pasado están refugiados, en Chilpancingo, y que por las 117
familias albergadas, el gobierno del Estado les aportaba 2 mil 500 pesos diario
para su respectiva alimentación.
Sin
embargo, reprocharon que desde el sábado, domingo, lunes e incluyendo martes, el gobierno estatal se ha olvidado por completo de ellos, adeudándoles
al menos 10 mil pesos sólo para su respectiva alimentación.
Los
inconformes, durante la protesta también aprovecharon para demandar al gobierno
estatal su respectiva reubicación, porque es incómodo estar habitando en un
salón, que no cuenta con las condiciones de protección e insalubridad.
También
urgieron al gobierno estatal que cumplan con su función de brindar seguridad
para sus familias, porque lo que desean es regresar a sus respectivas viviendas
y cultivar sus tierras, porque aquí el gobierno estatal no les brindan apoyo ni
para su alimentación.