Chilpancingo.
Abril 15 del 2013 / ANG.- Tras pretender llevarse un autobús de
la Empresa Estrella Blanca, presuntamente para poder distribuir la convocatoria
de inscripción para alumnos de nuevo ingreso, estudiantes de la Escuela Normal
Rural “Isidro Burgos” de Ayotzinapa fueron golpeados por taxistas, empleados de
la Central Camionera y transeúntes, quienes, en conjunto, lograron evitar que
el delito se llevara al cabo.
José Solano Ramírez, uno de
los estudiantes de dicha normal y participante de los hechos, detalló que
debido a que la Secretaría de Educación Guerrero (SEG) no otorgó los recursos
para difundir la convocatoria de inscripción para alumnos de nuevo ingreso para
el próximo ciclo escolar, él y sus compañeros decidieron robar un autobús a fin
de viajar por las siete regiones del estado, “pero desgraciadamente no pudimos,
nos insultaron y hasta nos golpearon, por lo que este lunes vamos a poner una
denuncia ante la Comisión Estatal de Defensa de los derechos Humanos (Coddehum)
porque fuimos agredidos físicamente”.
En tono molesto, dijo “no se
vale, ahora resulta que ya no podemos ni tomar prestados unos cuantos
autobuses, cuando siempre ha sido así, pero esta vez fuimos agredidos, nos
golpearon, nos insultaron hasta el cansancio y después de todo eso, resulta que
ni el autobús nos pudimos llevar, por lo que este lunes vamos a poner una
denuncia formal ante la Coddehum contra quienes resulten responsables porque no
se vale que nos traten así, ya que nosotros somos estudiantes y no merecemos
este trato”.
Entre las once y doce de la
noche del pasado viernes, aproximadamente unos 15 alumnos de la Normal de
Ayotzinapa, armados con tubos, palos y piedras, llegaron a la Central Camionera
y minutos después intentaron apoderarse de un autobús de la empresa de auto
transportes Estrella Blanca, pero en esos momentos, un grupo de taxistas,
empleados de la compañía de transportes turísticos y algunas personas que
pasaban por ahí, se percataron de los hechos y los comenzaron a insultar,
después los encararon y al último, los agredieron y lograron evitar que se
consumara su fechoría.
Las personas que agredieron
a los normalistas también se encontraban armadas con palos, por lo que los
estudiantes pensaron que eran policías, pero después se dieron cuenta que no lo
eran porque estaban vestidos de civil y nunca se identificaron, además de que
eran muchos más que ellos (cerca de 50 personas), por lo que lograron
controlarlos y después, desalojarlos del lugar.
“Nos pegaron con macanas,
tubos, palos y piedras, por lo que uno de nuestros compañeros normalistas se
lastimó la mano porque estando ya dentro del autobús, no pudo salir y tuvo que
romper una ventanilla y ahí fue cuando se cortó la mano”, explicó.
Ante estos hechos, Solano
Ramírez, señaló que este lunes acudirán ante las autoridades de la Comisión
Estatal de Defensa de los Derechos Humanos, así como a la Red Guerrerense de
Derechos Humanos para que ambas organizaciones analicen el caso y tomen cartas
en el asunto (ANG).