Acapulco, Gro., 20 de febrero de 2019., Osteoporosis, cáncer estomacal, accidentes cerebrovasculares e inclusive
infartos, son algunos de los riesgos que provoca el consumo excesivo de sodio
(sal casera) en los alimentos, por lo que debe ser disminuido el consumo
diario, informó la Delegación Guerrero del Instituto Mexicano del Seguro Social
(IMSS).
La sal tiene la capacidad de realzar el sabor natural de las
verduras, carnes, frutas y otros productos, por lo tanto, está presente en
nuestra alimentación, y es parte inseparable de nuestra dieta, pero esto no
implica que deba ser consumida en abundancia, advirtió el IMSS en la entidad.
El médico de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) N° 9 del
IMSS, Sergio Barrios Segoviano, explicó que, si bien el sodio es parte
esencial de los minerales que el organismo necesita para su funcionamiento, su
consumo en cantidades excesivas puede llegar a tener problemas a nivel
circulatorio o cardiovascular.
Explicó que de acuerdo con los especialistas del Seguro
Social, se recomienda consumir de dos a cinco gramos diarios, como una medida
de prevención contra los padecimientos mencionados.
El médico del IMSS mencionó que es muy común que una persona,
cuando inicia una alimentación sana, supervisada por un especialista en
Nutrición, la disminución del consumo de sal es una de las recomendaciones
principales, ya que la retención de líquidos es un factor que se atribuye al
sobrepeso y obesidad.
Destacó que de acuerdo con los nutriólogos, el consumo
excesivo de sal incrementa la sed, la cual trata de ser saciada con bebidas
azucaradas y energéticas, como refrescos, cuyo consumo continuado y excesivo
desequilibran el balance entre calorías ingeridas y calorías consumidas,
predisponiendo al sobrepeso y obesidad.
Los adultos y personas de la tercera edad son los más
afectados y pueden padecer: hipertensión arterial, problemas de edemas,
afectación a nivel renal, infartos, asma, problemas óseos, gástricos e
inclusive problemas estéticos como varices, ojeras y celulitis.
El médico recomendó evitar su consumo excesivo, además dijo,
hay alimentos que ya lo contienen, por lo que se pueden utilizar sustitutos
para dar la sazón deseada a los alimentos diarios.