viernes, 21 de noviembre de 2014

Del Director



De cumplirse lo que en fechas recientes anunciara el Presidente de la República Enrique Peña Nieto y ratificara al mismo tiempo el Secretario de Gobernación Federal Miguel Ángel Osorio Chong, es muy posible que los actos fuera de todo orden legal que se vienen cometiendo por supuestos estudiantes normalistas de Ayotzinapa y por integrantes de la CETEG estatal, dejen de ocurrir en los próximos días a efecto de que se vuelva la tranquilidad a los guerrerenses perdida de un tiempo a la fecha.

Nunca estaríamos condenando la desaparición forzada hasta el momento de los 43 estudiantes desaparecidos en la Ciudad de Iguala a finales del mes de septiembre pasado, pero si condenamos los actos vandalicos y de rapiña que al amparo del dolor humano muchas personas vienen cometiendo en busca de saciar intereses personales.

Ojala y quienes se han dedicado a cometer estos hechos vandalicos entiendan que sus acciones nada ayudan al dolor humano de los familiares de los desaparecidos, al contrario ya empiezan a ganarse el repudio de la sociedad porque sus acciones están afectando a la población guerrerense en general, sobre todo a los empresarios de grandes capitales que ya amenazan con abandonar el Estado por el daño que han sufrido sus empresas y gran parte de los trabajadores que con ellos laboran.

Los estudiantes desaparecidos deben tener una identidad plena de que fueron victimas por muy dolorosas que estas sean, por este lado quizás tengan razón los que vienen cometiendo toda clase de desmanes pero no se justifica que al amparo de estos condenables acontecimientos, se dediquen a afectar a toda una sociedad porque se siembra una imagen de que vivimos en un pueblo sin ley donde impera la ley del mas fuerte. Contra esos males estamos en contra.

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